El primer paso será desalar el bacalao si lo hemos comprado fresco, para ello lo desalaremos en agua fría durante 24 horas, cambiando el agua cada 6 horas, cabe destacar que a más grande sea el bacalao, más tiempo lo tendremos que desalar.
Si lo compramos congelado bastará meterlo en la nevera la noche anterior.
En una sartén pondremos el tomate frito, media cebolla, 1 diente de ajo, sal y un poco de azúcar
Lo dejaremos a fuego medio durante 35 minutos, hasta que la cebolla quede tierna.
Pasado este tiempo lo sacamos, retiramos el ajo y pasamos lo restante por la batidora, para que se una bien. Reservamos para más tarde
Vamos con el pisto de verduras. Para ello picaremos la cebolla y los pimientos, además también picaremos el calabacín
Ahora lo que haremos será incorporar las verduras en una sartén con un buen chorro de aceite de oliva, iremos removiendo para evitar que se peguen.
Cuando las verduras se vayan pochando añadiremos el tomate, y lo dejaremos que se cocine todo junto, durante 3 o 4 minutos a fuego medio.
El paso siguiente será enharinar el bacalao, el cual freiremos en abundante aceite parta que quede dorado por los lados.
Una vez listo, lo servimos con el pisto de verduras, bien caliente.